Alguna vez dijo Pablo Neruda:
En mi casa he reunido juguetes pequeños y grandes, sin los cuales no podría vivir. El niño que no juega no es niño, pero el hombre que no juega perdió para siempre al niño que vivía en él y que le hará mucha falta.
Cuando era chica, como toda nena soñaba con tener aquellos juguetes que publicitaban en la tele, no era tantos como ahora, pero si uno aparecía, yo lo quería. Hoy pasa lo mismo, los chicos bombardeados por los medios, piden cada producto que se les pone enfrente, pero qué pasa??? Muchas veces rompen desesperadamente el envoltorio, Arrancan el juguete de la caja, dicen: Wooouuuuuuu o esta re bueno, pero en cuanto te descuidas están adentro de la caja con el papel de regalo brillante en la cabeza, en una primera misión a Marte …
Así fuimos, así son y así serán los chicos.Nadie podrá negar que la funda de un almohada es un elegante vestido strapless a la espera del príncipe azul o que la cuchara de madera de la abuela es la espada que salvará a la princesa de la torre alta vigilada por un dragón. Los jueguetes pueden ser carísimos, pero si no los maneja la imaginación, no son otra cosa, que un grupo de piezas ensambladas, importados de china.
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